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¿Qué cagada me mandé? {Jeniffer}
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Campamento de Verano :: Habitaciones :: Habitaciones Populares :: Habitacion 007: Vanessa Waldorf & Skylar M. Romanov & Jeniffer M. Weinhofer
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¿Qué cagada me mandé? {Jeniffer}
Guardé las manos en los bolsillos de mi pantalón de jean claro y me paré frente a la puerta de la habitación de Jeniffer, apunto de tocar pero antes me detuve a pensar un momento. ¿Si estaba alguna de sus compañeras? Aún pero, ¿si estaba la presumida de Waldorf? Sonríe interiormente y pensé en las frases burlonas que me diría de verme allí buscando a Jeniffer como un idiota. Mi gran orgullo me gritaba que me fuera a la mierda y dejara ese asunto pero mi curiosidad y la ignorancia de Jenn me mataba tanto que no pude hacerle caso. Me apoyé en la pared de aquel pasillo y medité un poco más: ¿Qué mierda había hecho? Por más que le daba vueltas a mi cabeza no recordaba haber dicho o hecho algo para que Weinhofen estuviera molesta conmigo. Sabía que sí solía ser bocón, idiota y todo lo demás pero nada había sido así para que me ignorara.
Dejando atrás cualquier estupidez de mi cabeza me dispuse a tocar la puerta y lo hice con algo de impaciencia. Nadie respondió al instante y solo tuve que golpear nuevamente. - Soy yo, Jenn. Ábreme.- estaba listo para oír algún "lárgate" pero nada, y eso era peor a una respuesta hostil. Odiaba más que a nada que me ignoraran. Oí un ruido dentro y apoyé mi antebrazo en el marco de la puerta aún cerrada para lanzar un suspiro. - Quiero hablar, Jeniffer.- repetí deseando que fuera ella quien estaba tras la puerta y no Nessa. De Sky no me preocupaba porque bien ya la había visto de camino.
Era obvio que la rubia se había enojado conmigo, pero odiaba no saber por qué y lo más lógico era... Ir y preguntar, ¿no?
Dejando atrás cualquier estupidez de mi cabeza me dispuse a tocar la puerta y lo hice con algo de impaciencia. Nadie respondió al instante y solo tuve que golpear nuevamente. - Soy yo, Jenn. Ábreme.- estaba listo para oír algún "lárgate" pero nada, y eso era peor a una respuesta hostil. Odiaba más que a nada que me ignoraran. Oí un ruido dentro y apoyé mi antebrazo en el marco de la puerta aún cerrada para lanzar un suspiro. - Quiero hablar, Jeniffer.- repetí deseando que fuera ella quien estaba tras la puerta y no Nessa. De Sky no me preocupaba porque bien ya la había visto de camino.
Era obvio que la rubia se había enojado conmigo, pero odiaba no saber por qué y lo más lógico era... Ir y preguntar, ¿no?
Gunter E. Zibergman- Mensajes : 73
Fecha de inscripción : 04/01/2013
Re: ¿Qué cagada me mandé? {Jeniffer}
El humor no era mi mejor amiga desde hacía días ni para salir de fiesta ni siquiera para molestar a otros o simplemente pulular por los pasillos en busca de algo que hacer porque por más que me jodiera, me sentía vitalmente un poco traicionada además de confusa gracias a los rumores en el aire que tenían que ver con Gunter. Parecía quizás lo más estúpido y podía no preocuparme de lo que dijeran si no hubiera sido por un gracioso que lanzo una puya referente a lo que ambos habíamos hecho en el bosque aquella noche oscura de la que tampoco nos arrepentimos dado que nos habíamos visto más veces, pero sumar dos más dos era claramente meter por medio eso llamado álbum personal y tenía que quedar como tal.
Asi que cuando Nessa se ofreció a hacer algo ,la había dicho claramente que no con malos modos que siempre me arrepentía y preferí pasarme el dia metida con la tableta en la cama por supuesto en pijama ,si no iba a ir a ningún lado y para observar si iban a caer un rayo con fortuna en la cabeza de este mereciéndose chamuscarle al menos el pelo que fue lo único que me hizo reírme hasta que sonó la puerta con fuerza sacándome de mis pensamientos sintiendo como algo me decía que tanto pensar en Gunter había echo que se presentara en la puerta.
No pensaba abrir ni de lejos ni mucho menos mostrarle que me tenia jodida de una manera que ni sabia explicar aunque cierto era que mi cabeza respecto a eso llamado “sentimientos” era como un laberinto extremo ,de esos que cuando estas a su lado no quieres pensar que narices está pasando hasta tirarte en la cama pensativa a darle vueltas y realmente lo odiaba porque no quería burlas por su parte ,lo que provoco que dejara el móvil con un sonido que ya dejo claro que alguien había –Mierda –Farfulle antes de levantarme con fuerza a mandarle al carajo con es de hablar y casi me quedo con la pomo de la madera cuando asi abrí –No tengo nada que hablar contigo Zibergman –le mire fría usando su apellido mostrando mi cabreo dado que me gustaba llamarlo por su nombre -No tengo ganas de fiestas ,búscate a otra acompañante –hable sin saber en realidad porque vino venido arrepintiéndome de las propias palabras antes de taponar la puerta –Si has venido a reírte.. No estoy de humor –suspire no entendiendo aun como no le había dado con la puerta en las narices pero era algo asi como debilidad.
Asi que cuando Nessa se ofreció a hacer algo ,la había dicho claramente que no con malos modos que siempre me arrepentía y preferí pasarme el dia metida con la tableta en la cama por supuesto en pijama ,si no iba a ir a ningún lado y para observar si iban a caer un rayo con fortuna en la cabeza de este mereciéndose chamuscarle al menos el pelo que fue lo único que me hizo reírme hasta que sonó la puerta con fuerza sacándome de mis pensamientos sintiendo como algo me decía que tanto pensar en Gunter había echo que se presentara en la puerta.
No pensaba abrir ni de lejos ni mucho menos mostrarle que me tenia jodida de una manera que ni sabia explicar aunque cierto era que mi cabeza respecto a eso llamado “sentimientos” era como un laberinto extremo ,de esos que cuando estas a su lado no quieres pensar que narices está pasando hasta tirarte en la cama pensativa a darle vueltas y realmente lo odiaba porque no quería burlas por su parte ,lo que provoco que dejara el móvil con un sonido que ya dejo claro que alguien había –Mierda –Farfulle antes de levantarme con fuerza a mandarle al carajo con es de hablar y casi me quedo con la pomo de la madera cuando asi abrí –No tengo nada que hablar contigo Zibergman –le mire fría usando su apellido mostrando mi cabreo dado que me gustaba llamarlo por su nombre -No tengo ganas de fiestas ,búscate a otra acompañante –hable sin saber en realidad porque vino venido arrepintiéndome de las propias palabras antes de taponar la puerta –Si has venido a reírte.. No estoy de humor –suspire no entendiendo aun como no le había dado con la puerta en las narices pero era algo asi como debilidad.
Jeniffer M. Weinhofen- Mensajes : 78
Fecha de inscripción : 11/01/2013
Localización : Espiando a los lobos
Re: ¿Qué cagada me mandé? {Jeniffer}
Me sobresalté un poco cuando abrió la puerta con tal abrupto movimiento que me hizo caer de lleno en que sí estaba cabreada. Y muy cabreada, más de lo que había llegado a suponer. Presioné mis labios y seguí quieto junto a la puerta, con mi brazo aún apoyado en el marco. Me acerqué un poco y quise hablarle pero ella continuó con unos comentarios que no lograba comprender. ¿Zibergman? ¿Otra acompañante? No había querido otra compañía más que la de ella luego de lo que había pasado en el bosque y creía que todo iba bien con eso. Por lo visto no era de esa forma y por sus dichos debía de ser yo el culpable.
-¿De qué estás hablando?-le pregunté con rostro serio, mirando sus ojos claros que estaban llenos de hostilidad. -¿Por qué vendría a reírme? No entiendo, explícame.- me acerqué a ella que seguía sin salir de su habitación y puse el pie entre el marco de la puerta y la puerta para que no pudiera cerrala si eso tenía pensado hacer. La miré un instante más y si bien me preocupaba que estuviera enojada conmigo, no pude evitar soltar una sonrisa de lado. Se veía tan sexy en pijama y con esa mirada que tenía ganas de estirarme un poco y comerle la boca de nuevo como ya otras tantas veces había hecho. Está bien, si no quería salir golpeado era mejor guarda distancia mientras la rubia estaba cabreada.
Pude mirar un poco dentro de su habitación y no había nadie a simple vista, mejor para mi. -¿Estás sola? Sería mejor hablar en tu habitación si no te importa.- dije con calma pero algo me decía que me mandaría a la mierda sin más palabras.
-¿De qué estás hablando?-le pregunté con rostro serio, mirando sus ojos claros que estaban llenos de hostilidad. -¿Por qué vendría a reírme? No entiendo, explícame.- me acerqué a ella que seguía sin salir de su habitación y puse el pie entre el marco de la puerta y la puerta para que no pudiera cerrala si eso tenía pensado hacer. La miré un instante más y si bien me preocupaba que estuviera enojada conmigo, no pude evitar soltar una sonrisa de lado. Se veía tan sexy en pijama y con esa mirada que tenía ganas de estirarme un poco y comerle la boca de nuevo como ya otras tantas veces había hecho. Está bien, si no quería salir golpeado era mejor guarda distancia mientras la rubia estaba cabreada.
Pude mirar un poco dentro de su habitación y no había nadie a simple vista, mejor para mi. -¿Estás sola? Sería mejor hablar en tu habitación si no te importa.- dije con calma pero algo me decía que me mandaría a la mierda sin más palabras.
Gunter E. Zibergman- Mensajes : 73
Fecha de inscripción : 04/01/2013
Re: ¿Qué cagada me mandé? {Jeniffer}
El asunto era tan fácil como cerrar la puerta en sus narices mientras le mandaba al carajo seguido de ese rayo que con fuerzas deseaba que partiera en el mismo pasillo si hacía falta pero tampoco me iba a hacer sentirme mejor porque sabía cómo iba acabar toda la historia: Con eso llamado lagrimas como una Drama Queen asquerosa y tampoco quería darle el motivo de verlo para ser más débil delante suya asi que tampoco hice ese amago de cerrar mientras intentaba no mirarle directamente a los ojos o me robaría una sonrisa como una estúpida. Un poder extraño que tenia sin saber si era consciente o no de lo que podía lograr con ese contacto ,asi que mejor era apartarse antes de mandarlo todo a la mierda -¿Cómo que no sabes de que hablo? –Alce la ceja mas cabreada apretando la madera contra mi mano antes de que se estrellara contra su cara –No te hagas el idiota, se lo que has hecho –le espete intentando controlarme.
Le podía odiar de muchas formas y maneras sobre todo cuando me llego el olor a su colonia que fue principalmente el juego por lo que todo empezó al acercarse las distancias ,aunque eso de hacerse el desentendido me dolia.¿Que costaba confesar?, si le había pillado aparte de que se acabara lo que hubiera extraño y sin nombre que era mejor no ponérselo a veces para luego no caerte de bruces como ahora -Explícamelo tu ,Gunter –fue una respuesta casi sin sentido ya que no entendida que narices tenía que explicarle yo cuando el mismo había liado demasiado y quería parecer el ángel para seguramente volver a joderme -No te acerques mas –susurre no demasiado convencida captando como miraba la habitación solitaria ,solo con una cama deshecha junto con el silencio ,seguida de su proposición de entrar –Estoy sola –asegure con un suspiro no sabiendo si me estaba vacilando con aquella pregunta, teniendo la razón de que estábamos dando espectáculo y era mejor que pasara –Entra pero no toques nada –le advertí apartándome de la puerta antes de corretear a mi cama para sentarme más alejada posible y aovillarme –¿De qué quieres hablar? , si vienes a buscar algo seguramente lo abre quemado –mentí sabiendo que era una conversación de besugos puesto que apenas le dejaba hablar.
Le podía odiar de muchas formas y maneras sobre todo cuando me llego el olor a su colonia que fue principalmente el juego por lo que todo empezó al acercarse las distancias ,aunque eso de hacerse el desentendido me dolia.¿Que costaba confesar?, si le había pillado aparte de que se acabara lo que hubiera extraño y sin nombre que era mejor no ponérselo a veces para luego no caerte de bruces como ahora -Explícamelo tu ,Gunter –fue una respuesta casi sin sentido ya que no entendida que narices tenía que explicarle yo cuando el mismo había liado demasiado y quería parecer el ángel para seguramente volver a joderme -No te acerques mas –susurre no demasiado convencida captando como miraba la habitación solitaria ,solo con una cama deshecha junto con el silencio ,seguida de su proposición de entrar –Estoy sola –asegure con un suspiro no sabiendo si me estaba vacilando con aquella pregunta, teniendo la razón de que estábamos dando espectáculo y era mejor que pasara –Entra pero no toques nada –le advertí apartándome de la puerta antes de corretear a mi cama para sentarme más alejada posible y aovillarme –¿De qué quieres hablar? , si vienes a buscar algo seguramente lo abre quemado –mentí sabiendo que era una conversación de besugos puesto que apenas le dejaba hablar.
Jeniffer M. Weinhofen- Mensajes : 78
Fecha de inscripción : 11/01/2013
Localización : Espiando a los lobos
Re: ¿Qué cagada me mandé? {Jeniffer}
- No me hago el idiota.- dije desviando mi mirada un momento sin estar seguro de lo que decía. ¿Dónde mierda había metido la pata? Moví mi pie inquietante y recordé que no estaba bendecido con mucha paciencia así que era mejor darme cuenta solo o que soltara de una vez por qué carajo se había enojado. Llevé mi mano a mi frente y luego la pasé por mi cabeza para despeinarme, tal y como hacía cuando estaba en situaciones como esa.
Pasé con algo de lentitud a su cuarto y lo miré un poco más. Femenino, limpio y digno de aquellas tres populares que se hospedaban ahí. Me dio un poco de escalofríos de saber que estaba en su cueva pero no era el tema ahora. Cerré la puerta detrás de mi con calma y giré la llave con una vuelta para más privacidad. - Solo por si alguna de tus amiguitas viene.- comenté sin esperar a que se opusiera a estar encerrados. Pero lo cierto era que también la había cerrado por si se me antojaba convencerla de hacer algo más intimo. Aunque visto cómo iba todo solo me ganaría con eso era una buena puteada. - No me acerco.- dije mostrando mis manos como si fuera inocente de toda acusación, ocupando un lugar junto a la ventana sin tocar nada tal y como me había pedido.
- Estás enojada y de verdad te digo que no tengo idea de por qué. Quiero que me lo digas y me iré, así nada más.- lancé sin más rodeos porque eso no era mi estilo, Siempre todo claro y a la cara. - Te juro que no estoy haciéndome el idiota, Jeniffer. Dime por qué y no te molestaré más.- me crucé de brazos y la miré a los ojos, intentando descifrar qué pensaba pero me era imposible. Las mujeres eran bastante impredecibles.
Pasé con algo de lentitud a su cuarto y lo miré un poco más. Femenino, limpio y digno de aquellas tres populares que se hospedaban ahí. Me dio un poco de escalofríos de saber que estaba en su cueva pero no era el tema ahora. Cerré la puerta detrás de mi con calma y giré la llave con una vuelta para más privacidad. - Solo por si alguna de tus amiguitas viene.- comenté sin esperar a que se opusiera a estar encerrados. Pero lo cierto era que también la había cerrado por si se me antojaba convencerla de hacer algo más intimo. Aunque visto cómo iba todo solo me ganaría con eso era una buena puteada. - No me acerco.- dije mostrando mis manos como si fuera inocente de toda acusación, ocupando un lugar junto a la ventana sin tocar nada tal y como me había pedido.
- Estás enojada y de verdad te digo que no tengo idea de por qué. Quiero que me lo digas y me iré, así nada más.- lancé sin más rodeos porque eso no era mi estilo, Siempre todo claro y a la cara. - Te juro que no estoy haciéndome el idiota, Jeniffer. Dime por qué y no te molestaré más.- me crucé de brazos y la miré a los ojos, intentando descifrar qué pensaba pero me era imposible. Las mujeres eran bastante impredecibles.
Gunter E. Zibergman- Mensajes : 73
Fecha de inscripción : 04/01/2013
Re: ¿Qué cagada me mandé? {Jeniffer}
No quería que se largara por mas que le estaba echando literalmente de la habitación ,pero me estaba enrabietando su actitud como un santo de no saber nada y mucho menos como si mi idiota al hablarle de lo que sabía era chino o algo que no entendiéramos ninguno de los dos ,aunque al menos agradecí que no se acercara dado que mismamente podía haberle lanzado un cojín a la cabeza reiteradas veces antes de que me pusiera una mano encima ,sabiendo que lo peor de todo es que me gustaba su cercanía solo que ahora mismo me podía mas la traición -¿Por qué lo has hecho ,Gunter? , ¿Tan importante era presumir? –pregunte observando cómo cerraba la puerta con cerrojo, algo que no me daba miedo viniendo de él ni tampoco me hacía sentirme incomoda.
Ahora mismo tenía la cabeza como el bombo de una lavadora medio indecisa por encontrar un motivo a que narices necesitaba viniendo a la habitación además de hablar que se lo había podido ahorrar antes de pensar con la entrepierna y dejar que los comentarios fueran como una bomba de relojería. Sin embargo había un matiz que tampoco me cuadraba y era la típica posición alejada además de dispersa haciéndome caso cuando habitualmente ya hubiera saltado algo para picarme o hacerme una risa meticuloso, pero lo que se aventaba en su mirada era completamente descolocación, algo que me hizo bufar ligeramente antes de inhalar aire intentando controlar la inconformidad –No quiero que te vayas –susurre en bajo volviéndome loca por aquella petición. Estaba hecha una fiera con el pero eso no impedía al mismo tiempo el pensar que se largara para no volver y siendo sincera dos meses metida en este maldito campamento viéndole ir y venir como si nada ,me jodia mas que su comportamiento de crio.
-Te estoy hablando de las fotos Gunter –solté sin mirarle aovillándome entre la sabana mientras jugaba con un par de hilos – ¡Has ido contando lo del bosque a idiotas que ahora se creen que tienen derecho a mirarme como un puñetero trozo de carne! –me enfurecí a medida que soltaba las cosas –Se supone que quedaba entre los dos ,algo llamado privacidad porque confió en ti y eres un cretino –le insulte tensando mas mi mandíbula negando con la cabeza -No sé porque lo has hecho … no lo comprendo y lo peor es que me jode que estar asi –asegure ladeando la mirada dejando un leve espacio de silencio –Te odio al mismo tiempo que me vuelves loca ,llámalo masoquismo y ahora ríete a gusto antes de salir –me derrote apoyando la espalda en la pared ,esperando que no evitara decirme algo que no le culpaba o si que le iba a dejar la cara plana con la almohada.
Ahora mismo tenía la cabeza como el bombo de una lavadora medio indecisa por encontrar un motivo a que narices necesitaba viniendo a la habitación además de hablar que se lo había podido ahorrar antes de pensar con la entrepierna y dejar que los comentarios fueran como una bomba de relojería. Sin embargo había un matiz que tampoco me cuadraba y era la típica posición alejada además de dispersa haciéndome caso cuando habitualmente ya hubiera saltado algo para picarme o hacerme una risa meticuloso, pero lo que se aventaba en su mirada era completamente descolocación, algo que me hizo bufar ligeramente antes de inhalar aire intentando controlar la inconformidad –No quiero que te vayas –susurre en bajo volviéndome loca por aquella petición. Estaba hecha una fiera con el pero eso no impedía al mismo tiempo el pensar que se largara para no volver y siendo sincera dos meses metida en este maldito campamento viéndole ir y venir como si nada ,me jodia mas que su comportamiento de crio.
-Te estoy hablando de las fotos Gunter –solté sin mirarle aovillándome entre la sabana mientras jugaba con un par de hilos – ¡Has ido contando lo del bosque a idiotas que ahora se creen que tienen derecho a mirarme como un puñetero trozo de carne! –me enfurecí a medida que soltaba las cosas –Se supone que quedaba entre los dos ,algo llamado privacidad porque confió en ti y eres un cretino –le insulte tensando mas mi mandíbula negando con la cabeza -No sé porque lo has hecho … no lo comprendo y lo peor es que me jode que estar asi –asegure ladeando la mirada dejando un leve espacio de silencio –Te odio al mismo tiempo que me vuelves loca ,llámalo masoquismo y ahora ríete a gusto antes de salir –me derrote apoyando la espalda en la pared ,esperando que no evitara decirme algo que no le culpaba o si que le iba a dejar la cara plana con la almohada.
Jeniffer M. Weinhofen- Mensajes : 78
Fecha de inscripción : 11/01/2013
Localización : Espiando a los lobos
Re: ¿Qué cagada me mandé? {Jeniffer}
Quería buscar un precipicio y tirarme de cabeza para ver si así recordaba algo. Jeniffer me hablaba de una forma tan segura que me hacía dudar de mi mismo y mis estupideces. Elevé una ceja un instante sin apartar mi mirada de sus ojos verdes y pensar de manera extrañado lo que decía. Solía ser un presumido, muy presumido, pero eso Jenn lo sabía y no había otra cosa a lo que ella pudiera estar refiriéndose. ¡Mierda! Ya estaba a punto de cabrearme en serio.
- No me iré. Dime.-hablé en voz baja tal como ella lo hizo y me crucé de brazos. Jeniffer soltó al fin por qué estaba enojada y mi cara fue de... ¿asombro? ¿Qué mierda había pasado con esas fotos? La escuché con atención y negué con la cabeza lentamente mientras daba un paso hacia ella. Ahora entendía bien, a Jeniffer le habían llegado rumores de que yo había andado por ahí contando toda mi aventura con ella. De verdad que tenía razones para estar enojada pero yo no había hablado nada respecto a esa noche con nadie y las fotos no habían salido a la luz. Al menos no de mi parte. ¡Auch! Weinhofen estaba tratándome como una mierda y me sentí así pero... Carajo, yo no había contado nada de esa noche a alguien y no necesitaba contárselo a mis amigos para demostrarles nada.
- Jeniffer yo no dije nada.- alcancé a decir al tiempo en que decía que me odiaba y guardaba silencio. ¿Cómo podía pensar que iba a burlarme de ella? ¿Cómo pensaba que yo iba a hacer tal cosa? Suspiré y desvié la mirada de sus ojos porque me molestaba verla dolida. - Escucha.- me acerqué más y me puse de cuclillas junto a su cama, sin apartarle la mirada. - Yo no hice nada de lo que dices. Esas fotos que me diste no las vio nadie salvo yo...- callé mis palabras de repente y recordé algo inmediatamente. ¡El puto de Dominic! Me puse de pie y le di la espalda un momento. ¡Puto tipo! ¡Puto cotilla! Ahora estaba al tanto de lo que había pasado y de por qué Jenn se había enterado de algo como eso. Yo era completamente inocente, estaba seguro que Dominic había tocado entre mis cosas y había visto las fotografías, y como él tenía amigos tan imbéciles los rumores había corrido de boca en boca rápidamente. - Ahora recuerdo algo. Pillé a mi compañero de cuarto con ellas pero yo no se las mostré.- volví a aclarar aquello último, preocupado -para mi sorpresa- de que no me creyera ni una palabra de lo que le estaba asegurando.
Me acerqué otra vez y me senté junto a ella para tomar su mejilla, mirándola de forma serena. - Hey, Jenn. Yo no haría eso contigo.- susurré junto a ella y me acerqué con intensiones de besar sus labios porque me mataban las ganas desde que la había visto ignorarme en el comedor, tan atractiva con ese perfume adictivo que se ponía. Sentía que iba a volverme loco si me negaba ese beso, Jeniffer me había pillado al punto de no querer mirar a nadie más que no fuera ella y si no me creía lo que decía... A la mierda, seguiría insistiendo sin importarme si quedaba como imbécil o no.
- No me iré. Dime.-hablé en voz baja tal como ella lo hizo y me crucé de brazos. Jeniffer soltó al fin por qué estaba enojada y mi cara fue de... ¿asombro? ¿Qué mierda había pasado con esas fotos? La escuché con atención y negué con la cabeza lentamente mientras daba un paso hacia ella. Ahora entendía bien, a Jeniffer le habían llegado rumores de que yo había andado por ahí contando toda mi aventura con ella. De verdad que tenía razones para estar enojada pero yo no había hablado nada respecto a esa noche con nadie y las fotos no habían salido a la luz. Al menos no de mi parte. ¡Auch! Weinhofen estaba tratándome como una mierda y me sentí así pero... Carajo, yo no había contado nada de esa noche a alguien y no necesitaba contárselo a mis amigos para demostrarles nada.
- Jeniffer yo no dije nada.- alcancé a decir al tiempo en que decía que me odiaba y guardaba silencio. ¿Cómo podía pensar que iba a burlarme de ella? ¿Cómo pensaba que yo iba a hacer tal cosa? Suspiré y desvié la mirada de sus ojos porque me molestaba verla dolida. - Escucha.- me acerqué más y me puse de cuclillas junto a su cama, sin apartarle la mirada. - Yo no hice nada de lo que dices. Esas fotos que me diste no las vio nadie salvo yo...- callé mis palabras de repente y recordé algo inmediatamente. ¡El puto de Dominic! Me puse de pie y le di la espalda un momento. ¡Puto tipo! ¡Puto cotilla! Ahora estaba al tanto de lo que había pasado y de por qué Jenn se había enterado de algo como eso. Yo era completamente inocente, estaba seguro que Dominic había tocado entre mis cosas y había visto las fotografías, y como él tenía amigos tan imbéciles los rumores había corrido de boca en boca rápidamente. - Ahora recuerdo algo. Pillé a mi compañero de cuarto con ellas pero yo no se las mostré.- volví a aclarar aquello último, preocupado -para mi sorpresa- de que no me creyera ni una palabra de lo que le estaba asegurando.
Me acerqué otra vez y me senté junto a ella para tomar su mejilla, mirándola de forma serena. - Hey, Jenn. Yo no haría eso contigo.- susurré junto a ella y me acerqué con intensiones de besar sus labios porque me mataban las ganas desde que la había visto ignorarme en el comedor, tan atractiva con ese perfume adictivo que se ponía. Sentía que iba a volverme loco si me negaba ese beso, Jeniffer me había pillado al punto de no querer mirar a nadie más que no fuera ella y si no me creía lo que decía... A la mierda, seguiría insistiendo sin importarme si quedaba como imbécil o no.
Gunter E. Zibergman- Mensajes : 73
Fecha de inscripción : 04/01/2013
Re: ¿Qué cagada me mandé? {Jeniffer}
Era una idiota y podía perfectamente decírmelo a mí misma en voz alta o en pensamiento porque no tenía que fiarme de nadie .Ese era el plan original cuando había aceptado a venir al campamento donde se suponía que solo iba a ser diversión con jornadas de senderismo y lluvia.-¿Porque no caía de una santa vez el agua?-me pregunte mientras sentía la presencia de Gunter por la habitación en silencio esperando una respuesta a que su mente pensara porque era un cretino y lo aceptara de una vez que se fue de la lengua como todos los hombres cuando tenían algo en sus vidas de puro interés –Admítelo ya –le presione sin querer mirarle aunque en un fuero interno me sentí más segura de que no se largara de la habitación para desaparecer si más cansado de mis estupideces de cría infantil ,algo que también podía necesitar oír ,solo que el horno no estaba para bollos.
La paciencia se me acabo casi de inmediato antes de que abriera la boca mientras soltaba todo por lo que estaba cabreada hasta casi ese taladro de sentimiento contradictorios que venía tiempo siendo diferente a la relación establecida cuando nos conocimos, calificándola casi de arriesgada como un salto al vacío que tenía ese toque de adrenalina experimental que solo Gunter me proporcionaba y aun asi, no tardo en negarlo -¡Oh, vamos ya sabía que ibas a decir eso! –Alce mi mirada dolía apartando la sabana donde me cubría las piernas solo para seguir el trascurso de sus palabras queriendo ser el inocente –Gunter... solamente has podido ser tu, eres el unico que las tiene –le mire lastimeramente aceptando la cercanía casi al borde la cama volviendo a sentir esa sensacion de andar sobre arenas sin tener un soporte diciéndome que no tenia nada que ver cuando observe sus ojos casi desarmándome en su inocencia y solo casi – ¿Qué pasa? –pregunte cuando su voz se quedo entrecortada en la explicaciones hasta ver su semblante casi tan hostil como el plantado por mí.
-¿Que has dicho?-formule de nuevo incrédula de que hubiera sido tan estúpido sin llegar a ser una salida fácil para escaquearse de su culpa ante esos comentarios pero podía tener sentido además de encajar levemente unas piezas en un puzle mental –Eres un estúpido, ¿Dónde narices las tenias para que las cogiera? –le mire duramente avergonzada de que hubiera sido pasto de otros ojos que ya era mucho más de lo imaginable dado que solo pensaba que eran rumores de lo que hicimos junto que existían fotos y ahora era diferente a verlas –Eres un maldito descuidado, deberías haberle pateado el culo para luego venir a buscarme y repatearle yo –le incrimine cabreada con ambos. Uno por meter las narices y ahora con el por ser despistado .Agarre lo primero casi que pille entre mis dedos dejando las sabanas revolcadas en el suelo observando su duda de si le creería o no puesta en su cara, sirviéndole de poco antes de atizarle con el teléfono apuntando a su cabeza hasta palpar la almohada para darle de nuevo encolerizada como una cría antes de reírme quizás por los nervios –Que desastre eres –me tranquilice teniendo una cama como una leonera.
Se suponía que debía creerle ,algo que me costaba tras días ignorándole por no matarle como casi lo hubiera hecho apenas unos instantes antes con el móvil o con un zapato de Nessa de fina aguja serviría si lo hubiera alcanzado a sabiendas de acabar en el hospital ,lo que lo complicaba todo a peor porque no sabía qué hacer –No sé qué pensar ,Gunter-confesé sintiendo el peso acomodándose en la cama ,dejando que me acariciara la mejilla e incluso volviera ese contacto de sus ojos tan seductores como atrayentes ,sabiendo lo que vendría al instante si seguía acercándose a mis labios sin poner freno –Te he dicho que no me tocases –susurre rozando sus labios contra los míos soltando mi aliento por la boca antes de recorrer con mis dedos su pelo como una caricia hasta caer en esa tentación con un beso más lento que todos los anteriores ,casi rozando el borde de la ternura para que antes de profundizarlo más o perdernos en lo de siempre ,separarme y dejarle con la miel en los labios –No pienses que no estoy cabreada contigo ,ahora estoy más confusa y te largaría la lamparita a la cabeza si supiera donde esta –sonreí con un punto divertido volviendo a salvaguardar las distancias -¿Qué hay de especial para que no me traicionaras?-pregunte dubitativa mordiendo mi labio inferior nerviosa adema de atenta de si no me gustaba su respuesta volver a atizarle justo donde se veía el color de la lanzada anterior.
La paciencia se me acabo casi de inmediato antes de que abriera la boca mientras soltaba todo por lo que estaba cabreada hasta casi ese taladro de sentimiento contradictorios que venía tiempo siendo diferente a la relación establecida cuando nos conocimos, calificándola casi de arriesgada como un salto al vacío que tenía ese toque de adrenalina experimental que solo Gunter me proporcionaba y aun asi, no tardo en negarlo -¡Oh, vamos ya sabía que ibas a decir eso! –Alce mi mirada dolía apartando la sabana donde me cubría las piernas solo para seguir el trascurso de sus palabras queriendo ser el inocente –Gunter... solamente has podido ser tu, eres el unico que las tiene –le mire lastimeramente aceptando la cercanía casi al borde la cama volviendo a sentir esa sensacion de andar sobre arenas sin tener un soporte diciéndome que no tenia nada que ver cuando observe sus ojos casi desarmándome en su inocencia y solo casi – ¿Qué pasa? –pregunte cuando su voz se quedo entrecortada en la explicaciones hasta ver su semblante casi tan hostil como el plantado por mí.
-¿Que has dicho?-formule de nuevo incrédula de que hubiera sido tan estúpido sin llegar a ser una salida fácil para escaquearse de su culpa ante esos comentarios pero podía tener sentido además de encajar levemente unas piezas en un puzle mental –Eres un estúpido, ¿Dónde narices las tenias para que las cogiera? –le mire duramente avergonzada de que hubiera sido pasto de otros ojos que ya era mucho más de lo imaginable dado que solo pensaba que eran rumores de lo que hicimos junto que existían fotos y ahora era diferente a verlas –Eres un maldito descuidado, deberías haberle pateado el culo para luego venir a buscarme y repatearle yo –le incrimine cabreada con ambos. Uno por meter las narices y ahora con el por ser despistado .Agarre lo primero casi que pille entre mis dedos dejando las sabanas revolcadas en el suelo observando su duda de si le creería o no puesta en su cara, sirviéndole de poco antes de atizarle con el teléfono apuntando a su cabeza hasta palpar la almohada para darle de nuevo encolerizada como una cría antes de reírme quizás por los nervios –Que desastre eres –me tranquilice teniendo una cama como una leonera.
Se suponía que debía creerle ,algo que me costaba tras días ignorándole por no matarle como casi lo hubiera hecho apenas unos instantes antes con el móvil o con un zapato de Nessa de fina aguja serviría si lo hubiera alcanzado a sabiendas de acabar en el hospital ,lo que lo complicaba todo a peor porque no sabía qué hacer –No sé qué pensar ,Gunter-confesé sintiendo el peso acomodándose en la cama ,dejando que me acariciara la mejilla e incluso volviera ese contacto de sus ojos tan seductores como atrayentes ,sabiendo lo que vendría al instante si seguía acercándose a mis labios sin poner freno –Te he dicho que no me tocases –susurre rozando sus labios contra los míos soltando mi aliento por la boca antes de recorrer con mis dedos su pelo como una caricia hasta caer en esa tentación con un beso más lento que todos los anteriores ,casi rozando el borde de la ternura para que antes de profundizarlo más o perdernos en lo de siempre ,separarme y dejarle con la miel en los labios –No pienses que no estoy cabreada contigo ,ahora estoy más confusa y te largaría la lamparita a la cabeza si supiera donde esta –sonreí con un punto divertido volviendo a salvaguardar las distancias -¿Qué hay de especial para que no me traicionaras?-pregunte dubitativa mordiendo mi labio inferior nerviosa adema de atenta de si no me gustaba su respuesta volver a atizarle justo donde se veía el color de la lanzada anterior.
Jeniffer M. Weinhofen- Mensajes : 78
Fecha de inscripción : 11/01/2013
Localización : Espiando a los lobos
Re: ¿Qué cagada me mandé? {Jeniffer}
- Las tenía en mi cajón.-respondí inmediatamente, sabiendo que ese no había sido el mejor lugar ahora que lo pensaba. Pero me daba igual qué mierda pasaba si alguien las encontraba, porque era asunto de Jenn y mio, de nadie más. Por lo visto había gente estúpida y yo me había confiado demasiado aún en mi propio cuarto, que era compartido, algo completamente ilógico comparado con lo que pagábamos por estar en ese campamento. - Estamos a tiempo de ir a patearle aún.- bromeé pero por el rostro de Jenn me vi en la necesidad urgente de borrar mi sonrisa para que no fuera yo el pateado. Pero había llegado sin previo aviso su golpe en mi cabeza, no muy duro para mi pero sí sentía su ira. Me cubrí apenas con un brazo y reí de lo molesta que estaba. - Ya, tranquila.- murmuré observándola.
Mi mano siguió en su mejilla y la llevé con lentitud hasta su nuca, disfrutando de cada roce como no lo había hecho nunca. Me gustó que no me alejara como creía que tenía pensado hacer y el beso llegó segundos después. Lento, cálido, paciente hasta que se iba intensificando sin ser muy frenético. Me supo muy dulce, y quise morder sus labios pero no lo hice, aún no. - Que no te tocase... ¿De verdad creías que iba a ser capaz de cumplir eso?- sonreí contra sus labios para besar el superior, tirando de él mientras abría mis ojos. Y cuando iba a volver a besar, me detuvo.
La oí y me apoyé en la pared a su lado, mirando la cama de enfrente y con mis manos a los costados. Buena pregunta había realizado, y me sentí confundido con lo que iba a responderle. ¿Que había de especial? No me lo había preguntado antes, pero ahí estaba yo en su habitación queriendo arreglar las cosas con ella y deseoso de besar sus labios hasta que se cansara de mi. ¿Me había sucedido antes? Claro no. Como ya lo había pensado mi ego no me permitía eso... Pero Jeniffer había dejado eso a un lado y hasta ahora me daba cuenta. ¡Mierda! Si ella no sabía qué pensar, yo mucho menos. - No soy tan tonto como para traicionar de esa forma. Menos a ti.- dije con seriedad y giré mi cabeza para verla, sin tocarla. - ¿Crees que no eres especial para mi?- pregunté en serio, mirando sus ojos verdes.
off. Perdón la demora, linda
Mi mano siguió en su mejilla y la llevé con lentitud hasta su nuca, disfrutando de cada roce como no lo había hecho nunca. Me gustó que no me alejara como creía que tenía pensado hacer y el beso llegó segundos después. Lento, cálido, paciente hasta que se iba intensificando sin ser muy frenético. Me supo muy dulce, y quise morder sus labios pero no lo hice, aún no. - Que no te tocase... ¿De verdad creías que iba a ser capaz de cumplir eso?- sonreí contra sus labios para besar el superior, tirando de él mientras abría mis ojos. Y cuando iba a volver a besar, me detuvo.
La oí y me apoyé en la pared a su lado, mirando la cama de enfrente y con mis manos a los costados. Buena pregunta había realizado, y me sentí confundido con lo que iba a responderle. ¿Que había de especial? No me lo había preguntado antes, pero ahí estaba yo en su habitación queriendo arreglar las cosas con ella y deseoso de besar sus labios hasta que se cansara de mi. ¿Me había sucedido antes? Claro no. Como ya lo había pensado mi ego no me permitía eso... Pero Jeniffer había dejado eso a un lado y hasta ahora me daba cuenta. ¡Mierda! Si ella no sabía qué pensar, yo mucho menos. - No soy tan tonto como para traicionar de esa forma. Menos a ti.- dije con seriedad y giré mi cabeza para verla, sin tocarla. - ¿Crees que no eres especial para mi?- pregunté en serio, mirando sus ojos verdes.
off. Perdón la demora, linda
Gunter E. Zibergman- Mensajes : 73
Fecha de inscripción : 04/01/2013
Re: ¿Qué cagada me mandé? {Jeniffer}
La culpa de todo la tenía un maldito cajón sin protección ,asi sin mas era el cabreo por el que me había tirado más de una semana sin hablar con Gunter a pesar de que le mirara con cierto resquemor de ser tan despistado o idiota ,eso sobretodo porque no entendía como se podía ser tan estúpido de guardar fotos con ese contenido como quien guarda unos libros o revistas eróticas solo por hacerse el gracioso y a fin de cuentas lo preveía como algo de interés si le daba vueltas al tema una vez más –Sigues teniendo la culpa de que las viera ,¿a quién se le ocurre guardarlas en un cajón?-pregunte de nuevo exasperada de ser tan poco racional ,volviendo a blandir la almohada junto a su brazo tapándose la cabeza para no recibir algo más duro quedando en una escena un poco mas graciosa para negar después sin tener más remedio –Le pateare el culo ,en cuanto lo vea –me enfurruñe sentándome en la cama con todo por los suelos hasta serenarme y seguir dándole vueltas en la cabeza a todo lo acontecido.
Ya no estaba tan dolida, quizás solo por el efecto de saber que Gunter había callado nuestro secreto ajeno a que tenia cotillas en su habitación, además no cualquiera sino uno que de tener interés en fastidiar o amoroso, se decantaba mas por el dado que era homosexual además con pareja y era una nueva pieza del puzle que no encajaba. –No sé ,porque tu compañero tuvo que mirarlas , es gay –le mire a los ojos dejándole acomodarse en la cama ,observando como ese comentario se quedaba nada más que en el silencio porque nos besamos ,casi por inercia además del deseo de volver a sentir la esponjosidad de sus labios junto con ese mordisco débil que siempre me enloquecía.-Esperaba que me tuvieras miedo –confesé con una débil sonrisa mordiéndome el labio además de la pregunta que me salió tan dentro que antes de pensar porque le pedía explicaciones volvió aquella separación junto con el silencio solo acompañado de nuestras respiraciones.
Me acaba de meter en un lio importante ,preguntándole si era especial por algo en concreto ,quizás por las bromas o simplemente por el sexo ,algo halagador sin duda pero igual de dañino porque tenía la mente nublada con ese sentimiento de no crearme ilusiones como una coraza a la que no romper ,pero Gunter la derribaba a cabezazos sin saberlo ni siquiera él y ir mejor siempre una retirada a tiempo que meterte hasta el cuello en necias fantasías donde siempre acababa apareciendo la cruda realidad. –No es eso…. –levante la mirada con aquella pregunta fastidiándome no saber que responder aunque acercándome suavemente unos pasos ,no dándole esperanzas de enzarzarnos en un beso continuo hasta asfixiarnos pero asi aprovecharía el tacto de su cuerpo ,rozándolo con mis dedos como si fuera casualidad –No puedo sentirme especial si me cuentan que no has perdido el tiempo con otras ,sobre todo en la playa –le mire lastimeramente ,casi con celos entre las palabras que eran como dardos envenados aun sin definir si para mí o para ambos y lo peor era que me estaba luciendo en sacarlo todo –Eres libre de hacer lo que te dé la gana ,pero tampoco puedo evitar que me molesten esos malditos cotilleos –Bufe revolviéndome el pelo crispada buscando sus ojos con nerviosismo hasta parpadear intentando serenarme sin dejarme los labios entre mordiscos con ganas de que fueran los suyos –Para mi si eres especial ,eres casi una obsesión en mi cabeza y un maldito jaleo para mi cuerpo y no te voy a decir más cursilerías ,lee entre líneas –le señale con un dedo sonriendo de medio lado sabiendo lo que acababa de decirle casi sin respirar. Me enloquecía llegando al punto de estar sintiendo más que una amistad.
off: no Problem ,perdoname tu porque son larguisimos
Ya no estaba tan dolida, quizás solo por el efecto de saber que Gunter había callado nuestro secreto ajeno a que tenia cotillas en su habitación, además no cualquiera sino uno que de tener interés en fastidiar o amoroso, se decantaba mas por el dado que era homosexual además con pareja y era una nueva pieza del puzle que no encajaba. –No sé ,porque tu compañero tuvo que mirarlas , es gay –le mire a los ojos dejándole acomodarse en la cama ,observando como ese comentario se quedaba nada más que en el silencio porque nos besamos ,casi por inercia además del deseo de volver a sentir la esponjosidad de sus labios junto con ese mordisco débil que siempre me enloquecía.-Esperaba que me tuvieras miedo –confesé con una débil sonrisa mordiéndome el labio además de la pregunta que me salió tan dentro que antes de pensar porque le pedía explicaciones volvió aquella separación junto con el silencio solo acompañado de nuestras respiraciones.
Me acaba de meter en un lio importante ,preguntándole si era especial por algo en concreto ,quizás por las bromas o simplemente por el sexo ,algo halagador sin duda pero igual de dañino porque tenía la mente nublada con ese sentimiento de no crearme ilusiones como una coraza a la que no romper ,pero Gunter la derribaba a cabezazos sin saberlo ni siquiera él y ir mejor siempre una retirada a tiempo que meterte hasta el cuello en necias fantasías donde siempre acababa apareciendo la cruda realidad. –No es eso…. –levante la mirada con aquella pregunta fastidiándome no saber que responder aunque acercándome suavemente unos pasos ,no dándole esperanzas de enzarzarnos en un beso continuo hasta asfixiarnos pero asi aprovecharía el tacto de su cuerpo ,rozándolo con mis dedos como si fuera casualidad –No puedo sentirme especial si me cuentan que no has perdido el tiempo con otras ,sobre todo en la playa –le mire lastimeramente ,casi con celos entre las palabras que eran como dardos envenados aun sin definir si para mí o para ambos y lo peor era que me estaba luciendo en sacarlo todo –Eres libre de hacer lo que te dé la gana ,pero tampoco puedo evitar que me molesten esos malditos cotilleos –Bufe revolviéndome el pelo crispada buscando sus ojos con nerviosismo hasta parpadear intentando serenarme sin dejarme los labios entre mordiscos con ganas de que fueran los suyos –Para mi si eres especial ,eres casi una obsesión en mi cabeza y un maldito jaleo para mi cuerpo y no te voy a decir más cursilerías ,lee entre líneas –le señale con un dedo sonriendo de medio lado sabiendo lo que acababa de decirle casi sin respirar. Me enloquecía llegando al punto de estar sintiendo más que una amistad.
off: no Problem ,perdoname tu porque son larguisimos
Jeniffer M. Weinhofen- Mensajes : 78
Fecha de inscripción : 11/01/2013
Localización : Espiando a los lobos
Re: ¿Qué cagada me mandé? {Jeniffer}
"No puedo sentirme especial si me cuentan que no has perdido el tiempo con otras, sobre todo en la playa". Me fui imposible no sonreír un poco en su cara de manera divertida mientras elevaba una ceja y pensaba en lo que había mencionado. Tal vez estaba cabreada conmigo por las fotos pero también podría ser por el hecho de haber oído esas cosas de mi y de joder con otras campistas. Ok, era cierto que había andado por ahí en la playa con un que otra pero no pasaba a más de eso y una charla. Sucesos sin importancia para mi, solo socializar. Me encantaba ver ese lado celoso de Jenn, me había tomado por sorpresa pero me había agradado.
- Son solo tonterías. ¿Estoy en la habitación de alguna otra que no seas tú?- mencioné con calma, apoyando mi cabeza en uno de mis brazos mientras me recargaba en la pared. Jeniffer por primera vez me había expresado con palabras lo que sentía y me agradó saber que estaba como yo, medio confundida, gustosa y... no sabía qué otra palabra agregar. - Leo bien entre lineas.- fue lo único que pude decir mientras le sonreía. Aquellas confuciones que me había llevado a tocar la puerta de su habitación habían desaparecido. Tenía respuesta de por qué estaba enojada y qué era lo la tenía tan confundida. Ya no tenía motivos válidos para seguir ahí sentado pero no quería irme, estaba dispuesto a quedarme ahí aunque llegaran sus amigas y no abrirles la puerta.
Giré y la tomé de las manos para recostarla en la cama. Sostuve sus manos sobre su cabeza para que no hiciera nada y sonreí contra su rostro al tiempo en que me recostaba sobre ella lentamente. Con mis labios besé su mejilla hasta llegar a su oreja, lamiendo y suspirando entre cada beso que le daba. Besé su cuello, presioné mi cuerpo contra el suyo y fui a sus labios para morder un poco como si fuera algo masticable. - Tú eres una obsesión en mi para mi cabeza, mi cuerpo y todo lo demás.- susurré contra su rostro, dejando un camino de besos desde su cuello a su frente y sus mejillas. Solté sus manos y pasé una de mis manos por su cintura y despegué un poco su espalda de la cama para besar su cuello y bajar hasta su pecho. - Prométeme que si llegan Sky o Nessa no abrirás esa puerta...- hablé casi entre risas suspirando contra su cuerpo. Miré sus ojos y me detuve en ellos unos momentos para volver a hablar. - ¿Está todo bien entre nosotros? ¿Ya no estás enojada?
- Son solo tonterías. ¿Estoy en la habitación de alguna otra que no seas tú?- mencioné con calma, apoyando mi cabeza en uno de mis brazos mientras me recargaba en la pared. Jeniffer por primera vez me había expresado con palabras lo que sentía y me agradó saber que estaba como yo, medio confundida, gustosa y... no sabía qué otra palabra agregar. - Leo bien entre lineas.- fue lo único que pude decir mientras le sonreía. Aquellas confuciones que me había llevado a tocar la puerta de su habitación habían desaparecido. Tenía respuesta de por qué estaba enojada y qué era lo la tenía tan confundida. Ya no tenía motivos válidos para seguir ahí sentado pero no quería irme, estaba dispuesto a quedarme ahí aunque llegaran sus amigas y no abrirles la puerta.
Giré y la tomé de las manos para recostarla en la cama. Sostuve sus manos sobre su cabeza para que no hiciera nada y sonreí contra su rostro al tiempo en que me recostaba sobre ella lentamente. Con mis labios besé su mejilla hasta llegar a su oreja, lamiendo y suspirando entre cada beso que le daba. Besé su cuello, presioné mi cuerpo contra el suyo y fui a sus labios para morder un poco como si fuera algo masticable. - Tú eres una obsesión en mi para mi cabeza, mi cuerpo y todo lo demás.- susurré contra su rostro, dejando un camino de besos desde su cuello a su frente y sus mejillas. Solté sus manos y pasé una de mis manos por su cintura y despegué un poco su espalda de la cama para besar su cuello y bajar hasta su pecho. - Prométeme que si llegan Sky o Nessa no abrirás esa puerta...- hablé casi entre risas suspirando contra su cuerpo. Miré sus ojos y me detuve en ellos unos momentos para volver a hablar. - ¿Está todo bien entre nosotros? ¿Ya no estás enojada?
Gunter E. Zibergman- Mensajes : 73
Fecha de inscripción : 04/01/2013
Re: ¿Qué cagada me mandé? {Jeniffer}
El tema de las fotografías era un segundo plano demasiado borroso en este instante cuando me sentía más bien ridícula al mencionarle a Gunter todo lo que me pasaba por mi cabeza respecto a él ,casi todos los detalles sin llegar a ser ridículamente una cría pidiendo atenciones que por otra parte si no las había tenido era porque me había separado de su cercanía con eso de la traición o pudiera ser ,porque no quería sentir más cosas para luego darme el bofetón y andar llorando por los rincones con un corazon destrozado de bobalicona. Eso era lo malo de sentir que mis ojos le veían tan ajeno a tomarlo en serio, que casi esperaba que se riera entre ese halo de sinceridad mientras observaba como su sonrisa se formaba no sabiendo bien donde residía la gracia ni mucho menos la diversión de oír rumores de sexo alocado con otras chicas que me molestaba.
-¿Qué tiene que ver, eso? ,has venido porque estabas cansado de que te ignorara –le mire a los ojos casi no queriendo echarle nada en cara como quitándole hierro al asunto de la confesión ,aunque sonreí solo al pensar en esas tonterías como el mismo las llamaba ,que tampoco aclaraban nada de si era verdad o solamente se quedo esa aventura en la playa con un beso inocente que dijera que no significaba nada –Pues yo no leo nada entre las tuyas Gunter –me reí de puro agobio de no comprender si era algo bueno o malo todo eso que tenía en la cabeza y como siempre el mismo se encargaba de hacer que todo importara nada cuando mostraba esa pose despreocupada como llevando el control –Me siento una mosca atrapada en una telaraña –negué con la cabeza sonriendo más ampliamente antes de mandarlo todo a la mierda con esa suave caricia venia del impulso de tumbarme en la cama tan lentamente junto su cuerpo encima del mío ,que si tenía alguna conciencia de ser dura siempre era blanda cuando sabia donde besarme como las mejillas o simplemente el lóbulo dejando sus suspiros como cosquillas en mi oído ,provocando que soltara una suave risilla –No es justo que no pueda tocarte –me queje como una cría mimada sintiéndome más confortable a su lado como si no hubiera sucedido nada.
Adoraba ser la única al menos en mi cabeza, que viera la sensualidad de Gunter ,la manera de tratar como una presa al acecho antes de lanzarse a mis labios que se quedaron entre abiertos escuchando como era su obsesión casi en un murmullo ,que sin dudas en cuando mis manos se liberaros fueron a parar a su pelo para besarle con intensidad con esas ganas de sentir su aliento chocar contra el mío ,mientras revolvía sus mechones con suavidad analizando su cuerpo como una experta en encontrar todo en su sitio hasta morderle el inferior suyo sin soltarlo hasta que bajo a mi pecho y tuve que cerrar los ojos por esa extraña petición a no abrir la puerta si venían ellas –Te prometo que no dejare que entren y te vean aquí en mi cama ,a Skyler no le gustaría y menos si encuentran tu ropa interior –rodé los ojos divertida recordando una conversación más que antigua ,pero sin pensar en que ahora volveríamos a desnudarnos como si el mundo se fuera acabar y solo nos quedaba el sexo como método de escape, pero debía aprovechar esa ternura antes de que surgiera cualquier jodienda mas.
-No estoy enojada contigo Gunter ,lo estaba y demasiado porque pensé que solo era una diversión para tus ratos libres además de que eras un cerdo por enseñar las fotos como un trofeo ,pero eso de ser tu obsesión siempre lo mejora todo –alce mis cejas divertida en tono provocativo recorriendo con mis dedos su espalda hasta la altura de su cadera para masajear sus músculos con estos además de sentir el calor que emanaba de su piel .Toda una delicia abrasante que había echado de menos desde hacía días ,asi que no dude demasiado tiempo en jugar con su camiseta elevándola suavemente mientras buscaba con mi boca sus labios a pesar de estar en mi pecho para rozarlos de la misma manera dulce como había sido el otro beso antes de intensificarlo permitiéndome rozar su nariz contra la mía ,porque necesitaba la seguridad como toda mujer problemática mientras jugaba con sus labios a rozar su lengua contra la mía en besos cortos y responder a su última pregunta –No quiero que me hagas daño Gunter ,aunque suene repulsivo la palabra o de princesita ,jode demasiado sentir algo ,si no voy a ser la única –le mire a los ojos completamente en serio ,afirmándole que estaba todo solucionado pero dejando completamente la sinceridad volver a salir casi sin premeditarlo y esa duda que se volvió a repetir e intente callar volviendo a apegar su cuerpo contra el mío para deslizar aun mas mi mano contra su cadera hasta el final de su espalda y reconocer que todo seguía en su sitio bien firme –Me encanta esa parte de tu anatomía .
-¿Qué tiene que ver, eso? ,has venido porque estabas cansado de que te ignorara –le mire a los ojos casi no queriendo echarle nada en cara como quitándole hierro al asunto de la confesión ,aunque sonreí solo al pensar en esas tonterías como el mismo las llamaba ,que tampoco aclaraban nada de si era verdad o solamente se quedo esa aventura en la playa con un beso inocente que dijera que no significaba nada –Pues yo no leo nada entre las tuyas Gunter –me reí de puro agobio de no comprender si era algo bueno o malo todo eso que tenía en la cabeza y como siempre el mismo se encargaba de hacer que todo importara nada cuando mostraba esa pose despreocupada como llevando el control –Me siento una mosca atrapada en una telaraña –negué con la cabeza sonriendo más ampliamente antes de mandarlo todo a la mierda con esa suave caricia venia del impulso de tumbarme en la cama tan lentamente junto su cuerpo encima del mío ,que si tenía alguna conciencia de ser dura siempre era blanda cuando sabia donde besarme como las mejillas o simplemente el lóbulo dejando sus suspiros como cosquillas en mi oído ,provocando que soltara una suave risilla –No es justo que no pueda tocarte –me queje como una cría mimada sintiéndome más confortable a su lado como si no hubiera sucedido nada.
Adoraba ser la única al menos en mi cabeza, que viera la sensualidad de Gunter ,la manera de tratar como una presa al acecho antes de lanzarse a mis labios que se quedaron entre abiertos escuchando como era su obsesión casi en un murmullo ,que sin dudas en cuando mis manos se liberaros fueron a parar a su pelo para besarle con intensidad con esas ganas de sentir su aliento chocar contra el mío ,mientras revolvía sus mechones con suavidad analizando su cuerpo como una experta en encontrar todo en su sitio hasta morderle el inferior suyo sin soltarlo hasta que bajo a mi pecho y tuve que cerrar los ojos por esa extraña petición a no abrir la puerta si venían ellas –Te prometo que no dejare que entren y te vean aquí en mi cama ,a Skyler no le gustaría y menos si encuentran tu ropa interior –rodé los ojos divertida recordando una conversación más que antigua ,pero sin pensar en que ahora volveríamos a desnudarnos como si el mundo se fuera acabar y solo nos quedaba el sexo como método de escape, pero debía aprovechar esa ternura antes de que surgiera cualquier jodienda mas.
-No estoy enojada contigo Gunter ,lo estaba y demasiado porque pensé que solo era una diversión para tus ratos libres además de que eras un cerdo por enseñar las fotos como un trofeo ,pero eso de ser tu obsesión siempre lo mejora todo –alce mis cejas divertida en tono provocativo recorriendo con mis dedos su espalda hasta la altura de su cadera para masajear sus músculos con estos además de sentir el calor que emanaba de su piel .Toda una delicia abrasante que había echado de menos desde hacía días ,asi que no dude demasiado tiempo en jugar con su camiseta elevándola suavemente mientras buscaba con mi boca sus labios a pesar de estar en mi pecho para rozarlos de la misma manera dulce como había sido el otro beso antes de intensificarlo permitiéndome rozar su nariz contra la mía ,porque necesitaba la seguridad como toda mujer problemática mientras jugaba con sus labios a rozar su lengua contra la mía en besos cortos y responder a su última pregunta –No quiero que me hagas daño Gunter ,aunque suene repulsivo la palabra o de princesita ,jode demasiado sentir algo ,si no voy a ser la única –le mire a los ojos completamente en serio ,afirmándole que estaba todo solucionado pero dejando completamente la sinceridad volver a salir casi sin premeditarlo y esa duda que se volvió a repetir e intente callar volviendo a apegar su cuerpo contra el mío para deslizar aun mas mi mano contra su cadera hasta el final de su espalda y reconocer que todo seguía en su sitio bien firme –Me encanta esa parte de tu anatomía .
Jeniffer M. Weinhofen- Mensajes : 78
Fecha de inscripción : 11/01/2013
Localización : Espiando a los lobos
Re: ¿Qué cagada me mandé? {Jeniffer}
Me sentía muy bien con Jeniffer y sobre todo en su cómoda cama que podía jurar que era mil veces mejor que la mía. Las sábanas eran suaves y blancas y todo ahí olía a ella además de que el calor que empezaba a salir por sus poros era encantador. Mi labios siguieron recorriendo su rostro mientras lanzaba una risa corta entre cada comentario que hacía. -Hablas mucho, rubia.-volví a sus labios y mordí con deseo. -Y me encanta.- suspiré como si estuviera agotado y moví mi mano que estaba entre la cama y su espalda con lentitud, recorriendo más sus curvas.
Oí lo que Jenn tenía para decir y negué muy poco con la cabeza. Jamás la había tomado como una chica para mis ratos libres y pasarla bien, quizá había sido así en un principio porque era un idiota la mayoría de las veces pero las cosas eran diferentes y me estaba dando cuenta. Hasta sentí un ligero temor de querer quedarme de por vida en esa cama con ella. ¿Era lógico? Sonreí para mi mismo y la ayudé a quitarme la camiseta para luego arrojarla hacia la otra cama que estaba no muy lejos.
Seguí besando su cuello e inhalando su aroma cada vez que podía. -Por cierto, no te dije que te ves excelente con este pijama.-susurré en su oreja y me acosté sobre ella si nada más que oler su cabello y sentir su calor. Pero otra vez mis ojos se posaron fijos en ella cuando la oí decir que no quería salir dañada. La observé serio y me separé un poco de ella para acostarme a su lado. Pasé una mano por su cintura para abrazarla y solté una de mis sonrisas perezosas. -Escucha. Te dije que estaba en tu habitación y no en la de otra chica, con eso quiero decirte que solo me interesas tú, Weinhofen.- presioné más su cintura y no le di tiempo a hablar. -Me divierto contigo y la pasó genial pero eso no significa que esté jugando y que vaya a hacerte daño. Eso sería lo último que haría.- me acerqué para darle un beso y acomodé mi cabeza sobre su hombro para oler su cabello otra vez y hablar contra su oído. -Quiero que seas solo mía, Jeniffer ¿Me entiendes?- estaba siendo bastante claro y sincero con ella. Los rumores que ella había oído eran solo rumores sin sentido, y sentía que estaba cayendo en darle explicaciones. Siempre les había mencionado a mis amigos que no tenían que darle explicaciones de nada a nadie pero ya había llegado mi turno, y ahora entendía porque los imbéciles lo hacían. Simplemente por el hecho de que en verdad les interesaba la otra persona.
Oí lo que Jenn tenía para decir y negué muy poco con la cabeza. Jamás la había tomado como una chica para mis ratos libres y pasarla bien, quizá había sido así en un principio porque era un idiota la mayoría de las veces pero las cosas eran diferentes y me estaba dando cuenta. Hasta sentí un ligero temor de querer quedarme de por vida en esa cama con ella. ¿Era lógico? Sonreí para mi mismo y la ayudé a quitarme la camiseta para luego arrojarla hacia la otra cama que estaba no muy lejos.
Seguí besando su cuello e inhalando su aroma cada vez que podía. -Por cierto, no te dije que te ves excelente con este pijama.-susurré en su oreja y me acosté sobre ella si nada más que oler su cabello y sentir su calor. Pero otra vez mis ojos se posaron fijos en ella cuando la oí decir que no quería salir dañada. La observé serio y me separé un poco de ella para acostarme a su lado. Pasé una mano por su cintura para abrazarla y solté una de mis sonrisas perezosas. -Escucha. Te dije que estaba en tu habitación y no en la de otra chica, con eso quiero decirte que solo me interesas tú, Weinhofen.- presioné más su cintura y no le di tiempo a hablar. -Me divierto contigo y la pasó genial pero eso no significa que esté jugando y que vaya a hacerte daño. Eso sería lo último que haría.- me acerqué para darle un beso y acomodé mi cabeza sobre su hombro para oler su cabello otra vez y hablar contra su oído. -Quiero que seas solo mía, Jeniffer ¿Me entiendes?- estaba siendo bastante claro y sincero con ella. Los rumores que ella había oído eran solo rumores sin sentido, y sentía que estaba cayendo en darle explicaciones. Siempre les había mencionado a mis amigos que no tenían que darle explicaciones de nada a nadie pero ya había llegado mi turno, y ahora entendía porque los imbéciles lo hacían. Simplemente por el hecho de que en verdad les interesaba la otra persona.
Gunter E. Zibergman- Mensajes : 73
Fecha de inscripción : 04/01/2013
Re: ¿Qué cagada me mandé? {Jeniffer}
Estaba nerviosa y de ahí provenía todas las palabras como un grifo abierto casi sin centrarme en disfrutar de la calidez que trasmitía su cuerpo sobre el mío en besos lentos haciéndome sonreír como hacía días que no lograba hacerlo casi sin pensar en nada mas ,pero ahora me acongojaba irme de la lengua pudiendo tenerla ocupada en otras labores más afines ,como besarle hasta recorrer toda su cavidad bucal mientras observaba sus ojos y seguían mis manos el largo recorrido de su espalda ardiente por dentro de su camiseta con suavidad rozando cada cm de su piel hasta sus omoplatos para tirar de sus labios con algo más de fuerza como un juego privado entre los dos y aquello me encantaba más de lo que podía admitir.
Gunter en la habitación ,ambos solos sin molestias era quizás lo único necesario para dar rienda suelta al tiempo separados ,mientras concentraba mi atencion en sus ojos observando cada reacción dejando perderse mis labios contra su cuello en lentos besos hasta hacerle una nueva marca bajo su mentón con un ligero mordisco suave ,al mismo tiempo que su camiseta voló por los aires en cierta medida hasta la cama de Nessa permitiéndome disfrutar de la anchura de su cuerpo ,sin resistirlo para pasar mi lengua por esta hasta recorrerle en mas señales débiles pero sobre todo apegándole a mi cuerpo con una ligera sensación de Carpe Diem increíble –Fue lo primero que encontré –me sonroje suavemente recordando que estaba en pijama como una niña pequeña ,asi que mi decisión de desabrochar un par de botones de la blusa del conjunto no vinieron mal para darle un momento más sensual seguido de todos mis temores.
Pensé por un segundo que se iba a ir ,asustado sobre todo por ese momento de separación hasta sentir su abrazo tan cálido sobre mi cintura queriendo derretirme entre este momento tan extraño haciendo que mi cuerpo se apegara al suyo mientras buscaba el rincón de su torso caliente para poner mis manos jugando con las yemas de mis dedos y esperaba la seriedad de la respuesta a tanto sentimiento junto ,rodando los ojos cuando repitió la importancia de estar en la habitación y no en cualquier otra ,que ni tiempo me dio a responder o debatirle antes de sentirme aun mas acalorada junto su respiración y prestar mas atencion con mis labios sellados hasta dejarle acabar con algo más que una sonrisa ,casi con un deseo mas aferrimo de zanjar toda la pelea de palabras demostrándole que entendía lo que quería decirme y a decir verdad ambos teníamos el mismo deseo –Lo mismo deseo yo Gunter –gire mi cara para encontrarme con sus labios volviendo a besarle con más intensidad ,casi empezando de manera sutil en ligeros roces hasta revolver su pelo tirando entre mis dedos de sus mechones para profundizarlo ,dejando escapar mi aliento contra el mismo y removerme en la cama ,hasta sobreponerme a su cuerpo para bajar estos hasta su cuello de manera mas caldente sin perder el control –Quédate esta noche ,tenemos tiempo que recuperar –pedí con la voz entrecortada levantando mis ojos hacia los suyos con una leve risilla.
Mi proposición no venía con contenido sexual a sabiendas de que era siempre mejor la sorpresa de ir haciéndolo poco a poco ,casi sin darnos cuenta porque ahora solo me martilleaban esas palabras con felicidad hasta sentir los latidos de mi corazon acelerados y se me antojo deslizar mi oído hasta su pectorales para hacer la chorrada de oír el suyo antes de volver a posar mis labios contra su pectoral de manera sensual ,succionando esa zona con suavidad hasta dejarle un suave morado genuino y remarcarlo con las yemas de una de mis manos mientras la otra se enroscaba en su cadera y al final de esta para apegarle a mi cuerpo casi sin espacio –Estando juntos ,vas a acabar demasiado mal Zibergman –susurre alzando mis cejas divertida dándole el toque más sexy al reparar con mi lengua mis propios labios y volver a mirar su ligero morado por el golpe cuando me cabree -¿te duele?-pregunte dejándome caer entre la cama ,subiendo una de mis piernas hasta su cadera para rozar con los mismos dedos que estaban en su torso ,su frente ligeramente abultada solo por el momento.
Gunter en la habitación ,ambos solos sin molestias era quizás lo único necesario para dar rienda suelta al tiempo separados ,mientras concentraba mi atencion en sus ojos observando cada reacción dejando perderse mis labios contra su cuello en lentos besos hasta hacerle una nueva marca bajo su mentón con un ligero mordisco suave ,al mismo tiempo que su camiseta voló por los aires en cierta medida hasta la cama de Nessa permitiéndome disfrutar de la anchura de su cuerpo ,sin resistirlo para pasar mi lengua por esta hasta recorrerle en mas señales débiles pero sobre todo apegándole a mi cuerpo con una ligera sensación de Carpe Diem increíble –Fue lo primero que encontré –me sonroje suavemente recordando que estaba en pijama como una niña pequeña ,asi que mi decisión de desabrochar un par de botones de la blusa del conjunto no vinieron mal para darle un momento más sensual seguido de todos mis temores.
Pensé por un segundo que se iba a ir ,asustado sobre todo por ese momento de separación hasta sentir su abrazo tan cálido sobre mi cintura queriendo derretirme entre este momento tan extraño haciendo que mi cuerpo se apegara al suyo mientras buscaba el rincón de su torso caliente para poner mis manos jugando con las yemas de mis dedos y esperaba la seriedad de la respuesta a tanto sentimiento junto ,rodando los ojos cuando repitió la importancia de estar en la habitación y no en cualquier otra ,que ni tiempo me dio a responder o debatirle antes de sentirme aun mas acalorada junto su respiración y prestar mas atencion con mis labios sellados hasta dejarle acabar con algo más que una sonrisa ,casi con un deseo mas aferrimo de zanjar toda la pelea de palabras demostrándole que entendía lo que quería decirme y a decir verdad ambos teníamos el mismo deseo –Lo mismo deseo yo Gunter –gire mi cara para encontrarme con sus labios volviendo a besarle con más intensidad ,casi empezando de manera sutil en ligeros roces hasta revolver su pelo tirando entre mis dedos de sus mechones para profundizarlo ,dejando escapar mi aliento contra el mismo y removerme en la cama ,hasta sobreponerme a su cuerpo para bajar estos hasta su cuello de manera mas caldente sin perder el control –Quédate esta noche ,tenemos tiempo que recuperar –pedí con la voz entrecortada levantando mis ojos hacia los suyos con una leve risilla.
Mi proposición no venía con contenido sexual a sabiendas de que era siempre mejor la sorpresa de ir haciéndolo poco a poco ,casi sin darnos cuenta porque ahora solo me martilleaban esas palabras con felicidad hasta sentir los latidos de mi corazon acelerados y se me antojo deslizar mi oído hasta su pectorales para hacer la chorrada de oír el suyo antes de volver a posar mis labios contra su pectoral de manera sensual ,succionando esa zona con suavidad hasta dejarle un suave morado genuino y remarcarlo con las yemas de una de mis manos mientras la otra se enroscaba en su cadera y al final de esta para apegarle a mi cuerpo casi sin espacio –Estando juntos ,vas a acabar demasiado mal Zibergman –susurre alzando mis cejas divertida dándole el toque más sexy al reparar con mi lengua mis propios labios y volver a mirar su ligero morado por el golpe cuando me cabree -¿te duele?-pregunte dejándome caer entre la cama ,subiendo una de mis piernas hasta su cadera para rozar con los mismos dedos que estaban en su torso ,su frente ligeramente abultada solo por el momento.
Jeniffer M. Weinhofen- Mensajes : 78
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