Este cuerpo no se marca solo ( MOLLY L. DAURANT)

[justify]Era sábado muy temprano por la mañana, como ya todos saben, los sabados no hay clases, y que bueno, yo no tenía muchos animos de encararme con los maestros, sentía que si me ordenaban algo, me les iba a lanzar a los golpes.

Me desperté a eso de las 7 de la mañana, ¿porque tan pronto?, bueno por que aun era nuevo y no conocía bien quien eran aquí los fiesteros, pero en cuanto supiera quienes eran los que cada viernes se reunían en grupo, no me tardaría en ir a buscarlos presentarme e irme a beber con ellos, beber hasta morir.

Me bañe y me asee bien, afeitando me la barba (no me gustaba el bello facial me sentía un mono).

Cuando termine de bañarme, salí hacía mi recamara y mirando me desnudo tan solo con una toalla amarrada a mi cintura, me dije "logan debes hacer ejercicio, o vas a engordar".

Me acerque a mi tocador, me puse mucha loción, y luego fui a uno de mis cajones y saque de estos un conjunto deportivo, pans y camisa floja para que mi cuerpo se moviera sin dificultades, me puse unas calcetas blancas, y unos tenis grises.
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en media hora, trotando por la calle, me tope con un gimnasio con vidrios cristalizados que dejaban ver a el interior de el gym, y se podían ver bien los aparatos, así como la gente que ahí se encontraba esto si que era buena suerte, subí los pequeños escalones que conducían a la puerta de entrada, la cual al estar frente a ella la empuje ligeramente con la mano...

Entre sin conocer a casi nadie, pero algo era muy seguro, había mas ciudadanos que muchachos de el internado, se acerco a mi un entrenador, un muchacho delgado que se veía tenía bien trabajado su cuerpo bienvenido, ¿gustas que te ponga una rutina? negué con la cabeza y el me respondió o bien, entonces, sientete como en casa, puedes montarte al aparato que quieras asentí y continué mi camino.

Me fui a sentar a un aparato de esos donde trabajas piernas y brazos (como se llame xD)

estuve ahí varios minutos muy concentrado en lo que hacía, hasta que escuche que el resto de muchachos chiflaban como alagando a alguien.... yo detuve mi ejercicio y mire a la que venía entrando, no se veía nada mal.... me reí pero no por que fuera fea, si no por lo estupidos que se ven los hombres chiflando le a una mujer.... yo no le chifle pero igual no le quitaba la vista de encima

"You know how hard it can be To keep believing in me When everything and everyone Becomes my enemy and when There's nothing more you can do
I'm gonna blame it on you It's not the way I want to be I only hope that in the end you will see It's the Opheliac in me "

Era una brillante y bella mañana, la castaña no sabía en si, cual era la razón por la que un día, en el que no hay clases, estaba levantándose tan temprano, o mas bien, si lo sabía. Unos días luego de que su hermano mayor llegara de Seul, y como era de costumbre de el, mando un mensaje para anunciarle a su pequeña hermana que no por el hecho de haberse mudado tan lejos, debía dejar de cuidar su figura, la que había trabajado por años en Seul. Se levanto con algo de pereza de su cama y camino con lentitud hasta un pequeño escritorio frente a su cama, donde se encontraba un gran numero de papeles y folletos -Por aquí.. - Susurro con voz suave, pero con un toque de adormilacion en ella, hasta que finalmente encontró uno, donde anunciaban que por el lugar había un gran Gimnasio, aparentemente, era el gimnasio mas conocido de la zona y claro, Molly tenía todo lo necesario para asistir a ese mismo lugar.

Finalmente, decidida a ir a conocer el lugar, la fémina tomo una ducha y tras salir, se acomodo una ropa cómoda. Vistió una blusa a la cintura de color negro, dejando a la vista su liso vientre y se puso unos pants del mismo color que la blusa, un tanto ajustados, perfectos para hacer ejercicio. Vistió sus pies con unos tenis deportivos y para salir, se puso encima un suéter que simulaba ser de piel, mas no lo era.
Se delineo los ojos de negro y puso un pequeño brillo en sus labios, finalmente tomo su bolso, se acomodo su cabello suelto y salio de la habitación sonriente, sosteniendo entre sus delgados dedos el folleto donde venía la dirección de dicho lugar.

Mientras caminaba a la banqueta, había llamado a un Taxi y para su suerte, al llegar, ahí estaba el auto, esperándole. Molly le mostró el folleto y el taxista solo asintió y comenzó a conducir. Enseguida, llegaron a aquel lugar, la coreana pago lo que debía pagar y se bajo del taxi, entrando ahora en aquel lugar, no sin antes hacer sus registros.
Al mirar por la puerta para entrar a la zona para hacer ejercicio, capturo al instante el aroma a sudor y una ligera sensación refrescante, por el aire acondicionado. Cruzo aquella puerta con dejes de altura, incorporo bien su cuerpo y estiro un poco el cuello, dejando que al caminar, sus piernas y caderas hicieran lo suyo, pero fue peor de lo que creyó. De creer que no sería notada, fue que varios chicos que estaban ahí comenzaron a avivarle y mirarle de manera déspota y con picardia. Sus mejillas se sonrojaron y continuo caminando, pasando entre ellos hasta la parte de atrás, donde estaba un chico que solo le miraba, mas no le decía nada -Hey.. - Saludo con timidez y se subió a una de las maquinas, que estaban dos maquinas alejadas de las de el. Enseguida, comenzó a mover las piernas, para empezar con el ejercicio.

Tranquilos chicos les dijo el instructor sin poder ocultar su semblante alegre o burlon, como se le quiera ver que la señorita señalo al aparato donde se fue a subir la peliroja con rasgos asiaticos solo viene a hacer ejercicio concluyo la frase, y luego de ser regañados, todos soltaron un "aaaaaaw" cual niños tristes, los minutos se consumieron, y los chicos se acostumbraron a la presencia de tan sexy chica, así que ya la ignoraban y seguían en lo suyo.

Yo cambie de aparato y me fui a la caminadora a trotar un poco (la cual por pura casualidad estaba a un costado de dicha chica). Seguí haciendo mis ejercicios como si no supiera que ella estaba aun costado mío, pero entonces me llamo la atención, que un hombre como de unos cuarenta año (lo digo por que en su rostro poseía algunas arrugas) de mirada algo sospechosa y muy muy lujuriosa se acerco a la amiga que había causado alborotos minutos antes, yo deje de trotar y comencé a vigilarlo con la mirada te gustaria... al hombre se le iban los ojos hacía los pechos de la chica ir a comer el muy sinico se relamió la lengua de una manera un tanto asquerosa.
Yo sin esperar respuesta de la compañera de al lado me baje de la caminadora y me acerque a ellos, quiero imaginar que para cual quier chica una mirada tan lujuriosa de alguien muchos años mayores que tu es incomodo (curioso, por que yo también soy así de directo, pero mi excusa es que yo si soy joven y de buen ver)
usted no querrá que le rompa el tabique nazal verdad el hombre se dio la vuelta y con las manos en la cintura me respondió a ver si me dejo... levanto su brazo y puso su mano a la altura de su cara, mostrando me el dedo de en medio, eso me hizo cabrear y me le avalancé al cuello de su chamarra deportiva
el instructor vio eso y se aproximo a donde nos encontrábamos los tres... "coño, ya le arme una escena incomoda a una chica que no conozco, y con la que luego me gustaría ir a comer o algo, bien hecho Logan.... bien hecho" pensé entre mí mientras a la vez me debatía en jaloneos, y en si pegarle a este hombre o no...

Un suspiro de alivio salio de entre los labios de la fémina cuando el alboroto a su alrededor se había calmado gracias al entrenador de el gimnasio. Sus mejillas se habían pintado en un color rojizo por la vergüenza que le ocasiono todo aquel alboroto y termino por soltar otro suspiro, enfocándose ahora, solamente en ella y en lo que hacía.

Cuando pensó que todo estaba en calma, sintió como uno de los hombres se acercaba a donde estaba y se limito a quedarse con la cabeza media baja, sin voltear aun a ver a aquella persona, puesto que seguramente le iba a molestar. Y no estaba equivocada, cuando escucho la voz ronca de el hombre, levanto apenas la cabeza para verle y se ruborizo al instante tras ver como le hablaba e inmediatamente trato se cubrir sus pechos con sus brazos, para evadir la vista de aquel hombre depravado. Cuando abrió los labios para decirle al hombre que no saldría con el, miro como un segundo chico apareció, defendiendole un poco de aquel robusto hombre, pero, parecía que nada iba a salir bien. -Porfavor, deténganse- Dijo la castaña con la voz ahogada, estando un poco asustada de lo que podría suceder. Entonces, puso sus manos sobre el hombre que sostenía la chamarra de el mayor y los separo a como pudo, poniéndose en medio de ambos. -Dije que se detuvieran.. ¿Acaso no escuchan?- Su voz era firme, pero luego trago saliva y entonces, tenia que pensar rápido y safarse de la situación y de paso, ayudar al joven que le defendió. Gracias a Dios, era buenísima actuando.

Se puso a un costado de el joven y le abrazo el brazo, mirando al hombre de cuarenta años con una sonrisa -Disculpe a mi novio Señor, el es muy celoso.. ¿Verdad querido?- Miro al chico y antes de dejar que el dijera algo, miro al señor nuevamente -Discúlpeme, pero tenemos que irnos- Aun abrazando al joven de el brazo, comenzó a caminar junto con el y lo guío por entre algunas maquinas, yendo a la salida -Disculpe que dijera esas cosas.. - Dijo en un pequeño susurro, aunque sabía que el joven le escuchaba -De alguna forma debíamos salir de el problema.. ¿Qué no?- Soltó una pequeña risa y continuo caminando sostenida de su brazo, pasando entre aquellos hombres que le habían silbado.

Paren ya los dos idiotas... nos gritaba el entrenador de el lugar. ¿pero con tanta habladuría por parte de todos quien iba a prestar atención?, por un lado estaban ellos dos intentando detenernos y separarnos, pero por otro estaba la mitad de mamarrachos de el Gym animandonos con su clásica porra en coro "pelea pelea pelea" yo escuchaba el "paren ya" de la chica, no es que no le quisiera hacer caso, si no es que el puto anciano también me traía ganas y no me quería soltar No parare hasta que te pida perdon este dejenerado de mierda dije apretando los dientes disculparme de que, si la niña también quiere conmigo, pega ya hijo... que no por viejo significa que soy pendejo me enfado que dijera que la chica quería con él. Para mi había una regla de oro si no quereas pelearte conmigo, nunca le coquetes con la chica a la que le he echado el ojo yo primero hijo de ya tenía encarrerado el primer golpe y entonces el abrazo fuerte y repentino de la chica me hizo tambalear, ese abrazo me volvió a mi realidad, si golpeaba a este mayor de edad, me podían demandar, mas aparte me betaban de este gym, no valía tanto la pena, escuche todo lo que la chica dijo "su novio?" de que estaba hablando si no nos conocemos.
con novia o no te quiero para mi, solo te pido una cita mamasita se atrevió a decir el hombre, y le mando un beso con la palma de su mano
Esa acción me hizo saltar en los brazos de la pelirroja, pero me tenía bien sujeto, y no quería lastimarla, se disculpo y nos retiramos, cruzamos el lugar, y todos se me quedaban mirando uno de los chicos mientras hacía ejercicio dijo menudo jilipollas que se deja domar por la noviecita al escuchar esto todo el Gimnasio soltó una risa... me habían hecho quedar como un mandilón idiota y cobarde, salimos de el local caminando por la acera son unos idiotas... comente aun tragando me mi enfado...
ella no me soltaba de el brazo tu que opinas debo trabajar mas en mi brazo o así de duro esta bien dije a broma y sujete su mano para que no me soltara, me gustaba su agarre y sabía que con comentarios así podía soltarme, seguimos caminando por la calle a sido tu culpa por ir con ropas tan ajustadas a un lugar donde hay puro idiota, que se siente muy hombre cuando está en grupo, pero en realidad se masturba todas las noches por el poco pegue que tiene .

Yo tenía pinta de ser "chico malo" y todo, he incluso me gustaba piropear a las chicas, pero solo al principio ya cuando tenía la oportunidad de estar a solas me portaba caballeroso como ahora.
por cierto eres buena actriz y casi me trago él cuento de que soy tu novio y te beso gire la vista para mirarle su reacción

justo cuando lo hice, vi que pasábamos por enfrente de una cocina economica, mi tripa rugió venga te invito de comer la tome de la mano cruzando la calle y no me digas que no,.. me la debes, por ser tu heroe me reí un poco mientras cruzabamos a la otra acera